Blis es una joven artista de Bosques, estudiante avanzada de la Licenciatura en Trabajo Social del Instituto de Ciencias Sociales de UNAJ. Comenzó dibujando y pintando a los 15 años junto a amigos de la infancia. Luego, apareció el stencil y entre varies se lanzaron a las calles. Junto al grafiti, sus firmas (llamadas tags) y las frases pintadas en las paredes se hizo presente la adrenalina del recorrer las calles por las noches. Hoy, Blis es parte de la crew SMS. Dentro del lenguaje de la cultura hip hop y del arte urbano, una crew es un grupo con identidad y prácticas propias de acción artística grafitera. Actualmente son muy pocas las crew que, como SMS, están integradas exclusivamente por chicas de la zona sur del conurbano bonaerense.
Como estudiante avanzada de UNAJ, Blis también forma parte del proyecto de vinculación Reconocidas y no tanto, radicado en el Programa de Estudios de Género y en el Instituto de Estudios Iniciales, que fue aprobado en la convocatoria 2020 del CPyT. El equipo de Reconocidas y no tanto se propone visibilizar y fortalecer el trabajo gráfico autogestivo que hacen mujeres y disidencias de la zona sur del conurbano bonaerense.
En esta entrevista, Blis nos cuenta cómo, cada vez más, las chicas se apropian de las paredes del conurbano sur y las llenan con sus firmas, sus dibujos y su impronta. “Es súper irónico -dice Blis- porque el arte siempre fue el último orejón del tarro y nosotras somos marginadas dentro de lo marginado. Luchamos para que esto cambie de rumbo”.
P: ¿Cómo fueron tus comienzos en la acción artística urbana? ¿Qué recorridos hacías?
Al principio me gustaban mucho los lugares por los que pasa mucha gente. Los spots como las vías del tren y las paredes. Todos esos son lugares ideales para lo que es el vandal (pintar sin permiso, al margen de la ley, en espacios públicos y privados). Me gustaba ir al centro, a Capital, dejar marca en las paradas de bondi. El tema del vandalismo es que lo tenés que hacer súper rápido. Tenés que tener tiempo y sobretodo salir a la noche. De a poco fuimos mutando. Ahora nos gusta mucho más el ambiente de evento, porque mayormente se hacen con un propósito. Aunque no descartamos el vandal, si tenemos que elegir nos gusta más el evento porque nosotras ya somos pibas grandes que trabajamos, tenemos familia, estudiamos. En el evento podemos armar un buen diseño entre todas, plasmar algo lindo y atraer gente. Pero sobre todo podemos llevar a les niñes, preparar comida, tomar algo y compartir con otras y otros compas.
P: ¿Qué es para vos una artista urbana? ¿Te considerás una artista urbana?
No me alcanzarían las palabras para describir qué es un artista urbano pero creo que principalmente es luchar contra la intolerancia. Contra esta cosa de estigma. Cada vez son más los artistas que están, algunos marginados, algunos visibilizados, algunos recién iniciados. Dentro de la movida todos saben qué es lo que dice o qué significa el grafiti. Pero el desafío es que las personas de afuera, que quizás no están dentro del arte urbano, lo puedan interpretar.
P: ¿Cómo se formó SMS, la crew integrada exclusivamente por chicas de la zona sur del conurbano bonaerense de la que participás?
Me pasaba que nunca veía mujeres en los eventos a los que iba. Sólo hombres. Las crew eran siempre de cinco tipos y capaz una piba o ninguna. En la mayoría de los casos, según los pibes, esa chica se sumaba o porque era “novia” o porque andaba “con”… Así, siempre se denigraba o minimizaba la capacidad de la mujer para pintar… como que la mina sólo pintaba para gustarle a alguien y no porque pintar era algo que le gustaba a ella. Dentro de mi entorno, siempre veía micromachismos. “Déjame a mí la lata. Yo pinto. Yo soy mejor”, me decían ellos y el hecho de ser amigos desde la infancia no importaba. Obviamente ellos eran buenos pintando, no lo voy a negar, pero tampoco dejaban que yo pudiera expresarme o pudiera expandir mis conocimientos. Yo también era muy buena y por eso mismo me di cuenta que seguro había también otras pibas muy buenas que no estaban encontrando su lugar.
Al ver toda esta desigualdad, me empecé a sentir incómoda y me retiré del grupo en el que estaba en ese momento. Me dije “quiero armar un grupo de mujeres”. En el 2016 había una página muy conocida que era Graffiti Girls Argentina. Ahí empecé a hablar con una, con otra. Les preguntaba de dónde eran. Todas estábamos en diferentes puntos. Una era de Tigre, otra de La Plata o de Berazategui; había chicas de Bernal y de Once. Les comenté a ellas mi idea de querer pintar con mujeres y de empezar a hacerlo visible. Todas coincidimos en que veníamos de crews de hombres y estábamos pintando solas porque había cosas que ya no nos gustaban. Así, acordamos unir fuerzas, armamos un grupo de WhatsApp, nos juntamos en una plaza, comimos, compartimos pintura, nos llevamos muy bien y nos propusimos armar una crew.
Me parece que fue por esta misma cosa que al principio nos decían siempre, eso de que las mujeres se meten en la movida para curtir con algún pibe o por moda, que empezamos a reivindicar el “pussy power”: el poder de la puta en la jerga del grafiti. Hoy en día reivindicamos el lugar de la pussy como una manera de contestar aquello y decir “no por tener vagina somos putas, no por ser putas lo que hacemos es menos valioso”. Lo que estoy diciendo hay que entenderlo dentro de un contexto en el que yo también me estaba familiarizando con el feminismo. Había muchas cosas que no sabía y me fui empoderando en el mismo momento.
P: ¿Por qué se llama SMS crew y qué comparten entre las chicas que participan?
La crew se llama SMS y el nombre completo es Sentimientos Crew. Una compañera nos dijo pongámosle “sentimiento” que es lo que nos unió a nosotras. Entonces quedó SMS y ya vamos cumpliendo 6 años. En ese momento éramos como nueve chicas. Hoy en día algunas han dejado el arte y otras tantas siguen de manera individual. Pero también hay renovación y se sumaron chicas que arrancaron de cero con nosotras.
Todas venimos de barrios humildes, de familias que han tenido problemas, y tratamos también de mantener esa humildad. Hay muchas que tienen casi 9 o 10 años en la movida del arte. Algunas son mamás. Acá estamos haciendo el esfuerzo y en el camino nos hemos cruzado con una banda de compañeras. Puedo decir que son profesionales de lo que hacen y de lo que aman. Es súper irónico porque el arte siempre fue el último orejón del tarro y nosotras somos marginadas dentro de lo marginado también. Luchamos para que esto cambie de rumbo. Desde lo humilde y desde lo pequeño buscamos transformarlo, mutarlo para hacer otra cosa.
Más allá del grafiti, pensando en el arte en sí, también están la competencia y la individualidad. De quién es mejor, quién tiene mejores pinturas y demás. Pero hoy en día siento que de a poco se fue perdiendo esa competitividad. Ahora estamos recontra unidas y compartimos un montón de cosas. Además de la pintura, del lado de las mujeres veo que están recontra ubicadas. Siempre fue bastante chiquita la crew, hoy en día somos cuatro. Hemos hecho un montón, nos costó mucho pertenecer.
P: ¿Cómo surgen las ideas para pintar en la crew?
Al principio la temática siempre fue el vandal y el grafiti. Especialmente las bombas que es una rama del grafiti. Después fuimos haciendo dibujos, que se llaman carácter, después letras y así. Hoy en día lo vamos moldeando según la situación que nos atraviesa. Hemos hecho cosas con temática del poder femenino pero también hacemos diseños con respecto a la menstruación, el pañuelo verde. Ahora, vamos más por el lado del muralismo, diseños digitales, una compa es tatuadora, otra está tirándose para el lado del rap, y así de a poquito vamos aprendiendo entre nosotras también.
Hoy en día con las redes sociales podés tener contacto con mujeres de cualquier lugar y lo que veo es que estos últimos años en Latinoamérica se viene utilizando el arte como una manera de visibilizar problemas de cada país. Ahora veo que artistas de Argentina hacen grupos de WhatsApp y participan de videos en vivo por Instagram hablando con chicas de Brasil, de Colombia, de Venezuela y demás. De a poco, veo la unificación de la acción de las chicas.
La pandemia nos dejó en pausa un montón de proyectos a nivel nacional e internacional pero así y todo veo que las mujeres están unidas, están bien conformadas, militan y curten las calles.
P: ¿Cuál es la posición actual de SMS crew dentro del ambiente del arte urbano de la zona sur?
La verdad es que la estamos peleando un montón. Veo la sororidad, la empatía que hay dentro de la movida también y está buenísimo. Estamos marcando un montón la diferencia. Incluso los pibes hoy en día también se dan cuenta de eso y entre ellos se ubican también a la hora de hablar o hacer algo. Ya saben que ya no nos callamos, que estamos, existimos, resistimos y que no estamos más solas.
Antes de la pandemia, en enero 2020 y en 2019 también, hicimos eventos de grafiti. Siempre lo hacemos con algún propósito, como juntar mercadería, artículos escolares, etcétera. La idea del evento es plasmar algo lindo, transmitir que el arte no es algo malo, que la gente que anda en la movida no son todos delincuentes, drogadictos como muchos piensan. Nos interesa combatir el estigma hacia el arte callejero y mostrar que somos pibas piolas que tenemos ganas de dejar algo lindo y que no tenemos problema en transmitir lo que sabemos. Por eso está bueno que los pibes más chicos miren y que los vecinos se puedan sumar. Hay que entender que, a nivel histórico, siempre hubo una especie de injusticia con el arte, los pobres y las mujeres. A medida que me fui involucrando cada vez más en este mundo fui notando esa injusticia y desigualdad por parte del arte.
P: Para cerrar, hablemos de algo “sencillo”… Blis ¿qué es el arte para vos?
Para mí el arte es algo hermoso. Es una caricia diría yo. En este contexto de pandemia que estamos atravesando actualmente, el arte es ese pequeño latido que tiene la sociedad para sentir que todos los problemas súper difíciles pueden encontrar un espacio salvador. Ojalá el Estado pueda apoyar más los centros culturales en los que hay muches niñes que tienen que saber que el arte es hermoso. Desde la escuela siempre nos enseñan que hay ciertas cosas que te van a servir en la vida, pero no nos dicen que pintar y hacer dibujitos te sirve. Nos dicen: “te vas a morir de hambre”. Tenemos que cambiar esa idea y tenemos que luchar por lo que queremos. Yo Blis de la SMS puedo decir que a mí el arte me encontró, me abrazó y yo nunca más lo solté…
Acerca de las autoras / Reconocidas y no tanto
Proyecto de Vinculación CPyT – PEG / IEI – UNAJ* IG: @culturaurbana.unaj
