La importancia del vínculo entre India y Argentina, que tienen economías complementarias, en un mundo multipolar y en el marco de la cooperación Sur-Sur.
Meses después que Argentina le ganara a los Países Bajos el partido de la final de la Copa del Mundo en 1978, y mientras se estaba ejecutando el plan sistemático de tortura y desaparición de personas, delegaciones de 138 países se reunieron en Buenos Aires en el marco de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Cooperación Técnica entre Países en Desarrollo. Por consenso, se adoptó un Plan de Acción. En plena guerra fría, ello significaba un llamado a un nuevo orden económico internacional bajo un nuevo modelo de relaciones internacionales más apropiado a las circunstancias reales y con la motivación de reflejar plenamente los intereses de la comunidad mundial en su conjunto. Se establecieron así los lineamientos de lo que luego sería denominado mundialmente Cooperación Sur-Sur.
En el amplio, heterogéneo y plural conjunto de naciones que buscan con autonomía mejorar la calidad de vida de su población a través del desarrollo y la cooperación técnica, se destacan los liderazgos regionales de Argentina e India. Ambos países históricamente han buscado posiciones internacionales alternativas que fortalezcan su capacidad creativa para encontrar soluciones endógenas a las dificultades del desarrollo, de acuerdo con sus propias aspiraciones, valores y necesidades especiales; la persistente búsqueda de enfoques, métodos y técnicas innovadores especialmente adaptados a las necesidades locales caracteriza la historia de las relaciones entre India y Argentina, que han tomado un fuerte impulso durante los últimos años y se presenta como una sociedad mutuamente beneficiosa para ambos pueblos.
La República Argentina y la República de la India comparten una larga historia de relaciones diplomáticas y comerciales. India estableció una Comisión de Comercio en Buenos Aires en 1943, que posteriormente adquirió el carácter de embajada en 1949. Por su parte, Argentina abrió un Consulado en Calcuta en la década de 1920, que fue trasladado a Delhi como embajada en 1950. Desde aquellos años, una inquebrantable y sostenible amistad caracterizó la relación, compartiendo como uno de sus principios fundamentales el sistema democrático. India celebró éste año el 78 aniversario de su independencia del régimen colonial británico y se constituye en el régimen democrático más grande del planeta. Mientras que Argentina celebra 41 años de democracia ininterrumpida, período en el cual se ha convertido en referente regional y global en materia de transición a la democracia y respeto de los derechos humanos.
En febrero de 2019, ambos países elevaron su relación bilateral al nivel de “Asociación Estratégica” en el marco de la celebración del 70 aniversario de relaciones diplomáticas. El trabajo conjunto generó beneficios recíprocos como la promoción de inversiones indias en Argentina y la ampliación de las exportaciones. En 2022, India se consolidó como el cuarto socio comercial de nuestro país, la demanda representó el 5% del complejo exportador, y por el lado de la oferta india, representó el 2% de las importaciones de nuestro país, posicionándose así como un socio clave para la inserción de los productos argentinos, la mejora en la balanza comercial y el ingreso de divisas.
Durante el primer trimestre de 2024, el intercambio comercial reflejó un superávit de US $421 millones, con un significativo aumento de las exportaciones argentinas del 17.7% y una reducción de las importaciones del 19.9%. Los principales productos exportados por la India hacia Argentina incluyen aceites de petróleo, agroquímicos, hilados y tejidos, productos químicos orgánicos, medicamentos y vehículos. Las principales importaciones de la India de productos argentinos incluyen aceites vegetales (soja y girasol), cuero, cereales, productos químicos y legumbres.
La complementariedad comercial y la creciente clase media india demandante de productos y servicios, requerirá de un trabajo articulado en nuestro país para aprovechar las oportunidades y mejorar la exportación de alimentos procesados y con mayor valor agregado, como golosinas, vinos, quesos. La sinergia en la exploración y exportación de energía no convencional presenta un magnífico potencial. El incipiente posicionamiento de nuestros hermosos destinos turísticos en el mercado indio es otra oportunidad que no debemos dejar pasar: India ya ha recuperado el 61% de su mercado prepandemia, 13 millones de turistas indios salieron al extranjero en 2022 y se espera que en 2024 gasten más de 18.000 millones de dólares al año en viajes.
La asociación y la cooperación excede ampliamente el ámbito comercial: análisis geoespacial; inversiones en exploración en petróleo y gas; empleo y seguridad social; energía nuclear; biotecnología: defensa y mantenimiento de la paz; e investigación en salud, entre otras áreas, han mostrado avances significativos y un mutuo interés en acciones concretas, a través de técnicas complementarias y generación de espacios de asociatividad a largo plazo.
Ambos países le brindan una gran importancia al sistema universitario como mecanismo de ascendencia e inclusión social, las considera como las instituciones clave para el desarrollo basado en el conocimiento y la investigación científica: su internacionalización y vinculación puede generar la plataforma necesaria para que la cooperación sur – sur y el aprendizaje mutuo tome una dimensión específica y concreta. Sus 1.113 universidades conforman el tercer sistema de educación superior más grande del mundo, con aumento de la inversión pública y privada. India tendrá el mayor número de personas en edad de ir a la universidad en la próxima década y busca alcanzar pronto el objetivo de inversión educativa del 6% de PBI. La Política Nacional de Educación 2020 establecida en India promueve las colaboraciones de investigación – enseñanza y el intercambio de profesores – estudiantes con instituciones de educación superior extranjeras de alta calidad y la firma de acuerdos mutuamente beneficiosos con países extranjeros. Esta política coincide plenamente con el trabajo de internacionalización llevado a cabo desde nuestras universidades nacionales en la búsqueda de nuevos socios, con mayores oportunidades de complementariedad y aprendizaje que los socios tradicionales del sistema argentino.
En el plano multilateral, en 2023 Argentina ha mostrado su acompañamiento a la presidencia india del G20 bajo el lema “Una Tierra, una familia, un futuro” cuya conducción ha puesto la mirada en los desafíos y las oportunidades que afrontan las economías emergentes y ha sido una exitosa plataforma para que la voz de ambos países sea escuchada y considerada. La reforma del sistema financiero internacional, a través de la equidad y mayor armonía entre los socios, se presenta como una demanda urgente que requiere atención por parte del norte global. Es importante mencionar y agradecer el apoyo indio al reclamo por la soberanía de las Islas Malvinas, a través de una solución negociada y pacífica. Ambos países conocen y han sido víctimas históricas del colonialismo británico.
Por último, en agosto de 2022, India otorgó su apoyo a la Argentina para que ingrese al grupo de países de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica). En la cumbre presidencial del grupo en agosto de 2023 se anunció oficialmente la invitación a Argentina a integrar el bloque a partir del 1 de enero del 2024. Sin embargo, el ingreso de Argentina ha sido suspendido por el actual Gobierno, perdiendo una importante oportunidad de inserción global, acceso a mercados y diversificación de los vínculos internacionales. Irán, Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Egipto y Etiopía, se han incorporado exitosamente, consolidando a los BRICS como un espacio de coordinación plural, diverso y heterogéneo para el desarrollo, la desdolarización del comercio, la conectividad, la inversión y la seguridad energética y alimentaria.
La cooperación Sur – Sur, y el potencial de aprendizajes entre Argentina e India permite por un lado afianzar nuestra posición en el escenario internacional ante un desafiante contexto multipolar, y por otro lograr el histórico y ansiado objetivo de fortalecer la capacidad de los países en desarrollo para identificar y analizar juntos las principales cuestiones de su desarrollo y formular las estrategias necesarias para sus relaciones económicas internacionales de manera justa y soberana, con miras a establecer un nuevo orden internacional que involucre las diversas esferas políticas, económicas, sociales y culturales.
Acerca del autor / Gonzalo Tordini
Investigador en Relaciones Internacionales. Universidad Nacional Arturo Jauretche. Miembro del Centro Latinoamericano de Estudios Políticos y Económicos de India ( CLEPEI). Ex becario del Programa de Cooperación Económica y Técnica de la Cancilleria India. (EPTRI – Hyderabad). Lic. en Administración y Gestión (UNSAM). Máster en Cooperación económica Internacional (UIBE – Beijing). Máster en Relaciones Internacionales ( FLACSO – UDESA).
